lunes, 4 de agosto de 2014

Aniversario

NA/ Hola bueno pues como ahora es el 6to aniversario de que Doña Barbara salió al aire aquí les va un capitulo especial :) Disfruten!!
Barbara punto de vista.

viernes, 1 de agosto de 2014

La Vida Con Ella

N.A. / Hola como la mayoría ya sabra esta historia esta llegando a su final y bueno pueda que este o el siguiente capitulo sea el ultimo. Pero también les quería informar que voy a dejar de publicar en blogger y empezare a publicar en FF.net por si alguna le interesa buscar mi perfil esta de bajo del nombre de autor Gab95Lin. Como saben estoy a sus servicios. Algo que les voy a pedir es que lean y compartan y comenten sus comentarios son los que me ayudan a querer seguir escribiendo estas historias :) Gracias por leer!!

-Dios me vas a volver loco -Le dije mientras veía como me desabrochaba el cinturón del pantalón, no perdí tiempo y me los quite, una vez que ya no los tenia, me fui acercando a Barbara cada vez mas, la
tome en mis brazos y la acomode en la cama, una vez mas nuestros labios se encontraron, mordiscos y lenguas que jugaban, con solos besos podia sentir que Barbara también estaba excitada, mi erección ya se estaba mostrando y Barbara no perdió tiempo en quitarse sus propios pantalones, los dos tuvimos una batalla en quien estaba sobre quien. Mas besos y mordiscos fueron compartidos. De vez en cuando unos cuantos gemidos que se le escapaban a Barbara. Si esto era el principio no quería imaginar que pasaría cuando estuviéramos haciendo el amor.
Sin darnos cuenta los dos estábamos desvestidos, las sabanas de la cama por el suelo, sudor y sexo era lo que el aire holia. Entre la batalla por quien quedaba sobre quien al final fue Barbara quien gano. Me estaba montando con la misma rapidez y la misma pasión que una vez me monto, esa pasión que desbordaba a cualquiera a la locura. Y es que Barbara era toda pasión, ella era y es una fiera dentro y fuera de la cama. Yo estaba embrujado por el ritmo de sus caderas, se movían a un ritmo tan delicioso, así arriban así abajo, con su propio ritmo y fuerza, cada vez mas rápido, mis caderas trataban de alcanzar alquel ritmo que ella llevaba, claro este era un baile que los dos sabíamos bailar muy bien, sus manos sobre mi pecho asegurando que no se cayera con el moviendo, algunas veces aruñandome, marcandome, yo era su propiedad, su pelo volando de un lado al otro, dejando su cara libre para que yo la apreciara. Mis manos están suavemente colocadas sobre sus caderas asegurando el movimiento. Sus labios me llamaban, no tenia que decir nada, lo podia leer, con cuidado me fui sentando, no nos separamos. Fue entonces que Barbara me empezo a montar despacio, dejando que yo la llenara lo máximo posible, que la llenara completa, podia sentir como sus paredes se empezaban a estremecer, los dos estamos a punto de llegar a nuestro climax, y es que con Barbara nunca había que hacer mucho para que los dos llegáramos a ese delicioso climax que los dos tantos deseamos.
Sus labios encontraron los mios una vez, el beso fue sensual, suave, nada arrebatado pero era con deseo, amor y miedo. Miedo de que todo fuera un simple sueño. No la podia perder. No ahora que la había encontrado, y así ella sobre mi, sentados encontramos aquel orgasmo que tanto ansiamos. Barbara se corrió sobre y fue entonces cuando la acomode abajo de mi. Despacio percatandome de no lastimarla, me salí de ella, me arrecoste a un lado y le tome la mano.
-Barbara -Le dije tratando de recuperar mi respiración, -Eso fue
-Te dije que cuando estuviéramos juntos el mundo temblaría -Me dijo Barbara sin dejarme de terminar, me volvitie a verla y le robe un beso
-Una vez mas? -Le pregunte poniéndome en posición, ella asentó con la cabeza.
Así nos la pasamos toda la noche, yo sobre ella, ella sobre mi, yo en medio de sus piernas, nos exploramos totalmente, recuperamos los años perdidos, y es que la pasión desbordaba entre nosotros.
Fue la mejor noche que había tenido en años.
Sin importar los años que había pasado yo seguía igual o mas enamorado de Barbara Guimaran, la quería a mi lado para siempre y así seria.
No se cuando ni como nos quedamos dormidos. La mañana siguiente me levante de un brinco pensé que Barbara ya no estaría que había sido un sueño, pero para mi sorpresa me encontré una espalda descubierta a mi lado. Bueno que digo espalda si Barbara estaba como Dios la mando a este mundo.
-Barbara -Le susurre en el oído -Barbara desperta -Le dije moviendola despacio, la necesitaba despierta. Como niña pequeña se movió de lado a lado hasta que se dio la vuelta y con un ojo cerrado y uno abierto me dio un pequeño gruñido
-Doctorcito quiere repetir lo de anoche? -Me dijo con la voz mas sensual que eh escuchado en mi vida, casi me pone en ese instante pero como pude me tranquilize
-Barbara te casarias con migo? -Se lo dije asi, claro, sin vueltas, sin apuros, sin nada.
-Que? -Me dijo ella con una cara de sorpresa que juro que me detesto por no tener una cámara conmigo en ese instate
-Si! Casate con migo Barbara Guimara -Le dije sentando frente a ella. Sin decir nada vi como una lagrima se le caia por su mejilla, se acerco a mi, y puso sus brazos sobre mi cuello. La senti respirar y seguir callada por lo que se sintió  una eternidad. Yo solo coloque un brazo al rededor de su esbelta cintura y me quede esperando. Barbara se izo para atras y me miro fijo en los ojos.
-Si -No me pude contenter la bese y le di un fuerte abrazo.
El resto del dia pasamos planeando la boda. Aviamos acordado no esperar mas y decidimos que la boda solo seria para nosotros dos, que nuestra testigo seria la Dra. Magil. Ese mismo fin de semana volamos a Atlanta City y nos casamos. Decidimos que nos quedaríamos en Chicago empezando una nueva vida juntos. Solo los dos. Y así.
Y es así como hemos llegado aquí. Diez años de casados. Cuerpos cansados, cambiados, pero al final juntos. Si hay algo que no ah cambiado es nuestra pasión, sigue igual o mejor que la que tuvimos aquella noche donde no pude estar mas lejos de ella. La que fue nuestra primera vez.
Si, éramos los mismos pero ahora somos diferentes, esta vez nos entendemos, cuando los días se ven oscuros por recuerdos no nos gritamos. No. Nos buscamos por apoyo, nos buscamos por una abrazo, o una caricia que nos cambie aquel oscuro día por uno soleado lleno de amor. Al final Barbara y yo hemos encontrado nuestro final feliz. Puedo decir que estos últimos diez años han sido un sube y baja, cuando Maricela se entero que Barbara estaba viva y que estábamos felizmente casado se molesto pero luego entendió que Barbara y yo siempre estuvimos destinados a estar juntos. La que no tomo la noticia bien fue Judith pues estaba confundida pero Barbara se la supo ganar. Debo decir que Barbara es una excelente abuela. Los últimos dos años nos la hemos pasado viajando alrededor del mundo. Si mi vida con ella es la mejor. Ahora debo irme que Barbara me espera para irnos a un safari.
                                                                                                             Fin.